BANGLADÉS

P. Ajit Victor Costa, OMI (Superior de la Delegación)
8 de enero, 2020

Iglesia de Mazenod (Izquierda), Escuela de San Eugenio (Derecha)

La Iglesia De Mazenod, Nayanagar (Baridhara), Dhaka, hasta un cierto punto puede ser identificada como ¡un recinto “de múltiples facetas”! Cuatro lugares bien distintos brillan con belleza propia en este recinto:

  • El Escolasticado De Mazenod,
  • La Iglesia De Mazenod,
  • La Escuela de S. Eugenio, y
  • El Centro de Salud De Mazenod.

Por el simple hecho de llevar estos nombres, estos centros dan testimonio del Carisma de De Mazenod, “Evangelizar a los nuevos pobres”. Los Oblatos llegaron a Bangladés en 1973. Desde entonces, se han comprometido sin descanso en la evangelización de los pueblos indígenas, de la gente de las plantaciones de té y de las migraciones internas en cuatro diócesis de Bangladés.

¡un recinto “de múltiples facetas”!

En 1980, los Oblatos compraron un pequeño terreno en Nayanagar, entre colonos que ocupaban  de manera ilegal distintos terrenos. Fue una aventura humilde y audaz a la vez. El terreno era muy bajo, también el de los alrededores. Prácticamente, en cada estación de lluvias, los habitantes sufrían mucho con las inundaciones. Por suerte, el complejo De Mazenod tenía una parte más elevada. Varias veces, durante fuertes inundaciones, el recinto fue utilizado como refugio por las víctimas. Todo tipo de personas, musulmanas, cristianas, hindúes y budistas, eran alojadas. Y cuando incluso esto era suficiente, a las víctimas se les permitía utilizar la Iglesia y las terrazas del Escolasticado y de la Residencia de los padres oblatos.

Viendo la lamentable condición médica de los niños, las madres y de los más pobres de estos pobres colonos sin papeles, casi todos migrantes internos en la ciudad de Dhaka, los padres oblatos invitaron a las Hermanas de Madre Teresa (MC), para ofrecer un servicio sanitario. Una vez a la semana, dos hermanas llegaban desde la Iglesia del Santo Rosario, Tejgaon, y ofrecían servicios médicos en el complejo De Mazenod. Después de varios años de este servicio improvisado, las Hermanas del Prado, una congregación misionera llegada de Francia, alquilaron una casa, cerca de la Iglesia De Mazenod y tomaron el relevo del servicio de salud durante muchos años. Tras su partida, las Hermanas Azules llegaron y continuaron la labor desde una casa que habían alquilado. Desde entonces, prosiguen este noble ministerio hasta el día de hoy.

En 2013, después de 32 años de lucha, los Oblatos pudieron resolver el problema con la propiedad de la tierra y construir cuatro edificios o complejos de hormigón. Asociados de la misión de los oblatos de buen corazón compartieron su sacrificio e hicieron generosas donaciones para estas construcciones. Ya antes se había levantado la Iglesia De Mazenod, el Escolasticado y la Casa Oblata con ladrillo y con techo de estaño. Las Hermanas Azules tuvieron que interrumpir su servicio de salud durante la construcción de los complejos. A partir de 2019 han podido retomar su trabajo. Dos veces al mes, en sábado, las HH. Emilia, Rita y Agnes trabajan en el Centro de Salud. Una vez más, “las manos que sanan” vuelven a ocuparse de los niños, de los más pobres de entre los pobres, y de los desamparados.