VATICANO

XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos


El Secretariado general para el Sínodo de los Obispos publicó el 7 de septiembre de 2021 los documentos para el próximo Sínodo de la Iglesia sobre la Sinodalidad.

El Secretariado ha hecho público el documento preparatorio y un Vademecum (manual) para ayudar a las diócesis locales y a las Iglesias en la tarea a realizar en la primera fase del proceso sinodal de toda la Iglesia, que durará en total varios años. Indican así los principios que guiarán el itinerario del Sínodo sobre la Sinodalidad. Con la convocatoria de este Sínodo, el Papa Francisco invita a toda la Iglesia a reflexionar sobre un tema que es decisivo para su vida y su misión: la Sinodalidad.

¿Qué es la Sinodalidad?

El término “sinodalidad” denota el estilo particular que describe la vida y misión de la Iglesia, expresando así su naturaleza como Pueblo de Dios que camina juntos.

Todo el Pueblo de Dios participa de la misma dignidad y vocación a través del Bautismo. Todos nosotros, en virtud de nuestro bautismo, participamos activamente en la vida de la Iglesia. En este sentido, la sinodalidad permite avanzar juntos al conjunto del Pueblo de Dios, a la escucha del Espíritu Santo y de la Palabra de Dios, en la comunión que Cristo establece entre nosotros. Así, “una Iglesia sinodal” avanza en comunión con vistas a la común misión mediante la participación de todos y cada uno de sus miembros.

El objetivo de este Sínodo

Por tanto, el objetivo de este Proceso Sinodal no es ofrecer una experiencia sinodal pasajera o para un momento concreto, sino más bien ofrecer a todo el Pueblo de Dios una oportunidad de discernir juntos la forma de avanzar en el camino que haga de nosotros, cada vez más, una “Iglesia sinodal” a largo plazo.

Inauguración solemne en presencia del Santo Padre

La inauguración solemne del Sínodo tendrá lugar en Roma el 9-10 de octubre, y en las iglesias particulares el 17 de octubre; y concluirá en el Vaticano en octubre de 2023 con la asamblea de obispos de todo el mundo.

El Proceso Sinodal, de tres años de duración, contará con tres fases (diocesana, continental, universal) de consultas y discernimiento:

Fase diocesana: consulta y participación del Pueblo de Dios

Las Iglesias particulares comenzarán su itinerario el domingo 17 de octubre, bajo la presidencia del obispo diocesano. El objetivo de esta fase es la consulta al Pueblo de Dios. El Documento Preparatorio, publicado el martes, junto con el Vademecum y el Cuestionario, pretenden servir sobre todo de instrumentos que faciliten esta primera fase de escucha y consulta al Pueblo de Dios.

Una vez se haya obtenido el material, se elaborará un primer borrador de Instrumentum laboris, que será publicado y enviado a las Iglesias particulares en septiembre de 2022.

Fase continental: diálogo y discernimiento.

Esto marcará el comienzo de la segunda fase, que está programada entre septiembre de 2022 y marzo de 2023. El objetivo es implicar en un diálogo sobre el Instrumentum laboris. Al término de sus debates, cada agrupación continental redactará un documento final que enviarán al Secretariado general en marzo de 2023.

El Secretariado general procederá entonces a elaborar un segundo Instrumentum laboris, a partir de las respuestas. Se espera que se publique en junio de 2023.

Fase universal: los obispos de todo el mundo en Roma

El itinerario sinodal culminará en octubre de 2023 con la Asamblea de los Obispos en Roma, siguiendo los nuevos procedimientos establecidos en 2018 por el Papa Francisco en la Constitución Episcopalis communio.

Los sínodos han sido una parte ordinaria de la vida de la Iglesia desde los primeros siglos, con Iglesias locales y diócesis convocando sínodos en los que debatir asuntos teológicos y pastorales relevantes para su tiempo. Tras el Vaticano II, el Papa Pablo VI creó un secretariado permanente del sínodo de los obispos en Roma para convocar a obispos de todo el mundo para que ayuden juntos a dar forma al pensamiento del Papa en determinados asuntos.