D.E.P.

Georges Laudin nació en París el 15 de enero de 1926. En 1944 Francia, todavía inmersa en la guerra, fue liberada de la ocupación nazi. Georges, con 18 años, decidió consagrar su vida como religioso y misionero. Ingresó en el noviciado de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada en Pontmain; junto a él estaba también el futuro beato y mártir Jean Wauthier. Georges hizo sus primeros votos el 15 de octubre de 1945, 15 días antes que Jean. Los dos amigos volvieron a encontrarse en La Brosse-Montceaux para estudiar filosofía y posteriormente teología en Solignac. Ambos hicieron su oblación perpetua el 8 de diciembre de 1949, y fueron ordenados sacerdotes, también en Solignac, el 17 de febrero de 1952.

Aquel verano, ambos oblatos siguieron caminos misioneros diferentes. En octubre, el p. Jean Wauthier dejó Francia para ir a la Misión de Laos; el p. Georges Laudin recibió su primera obediencia el 8 de marzo de 1952 para la provincia OMI del Norte de Francia (París). Ahí fue destinado a la predicación de misiones parroquiales, también conocidas como “Misiones Populares”.

Por entonces, entre 1950 y 1970, muchos oblatos de Francia participaron en la renovación de este antiguo concepto de misiones domésticas para organizar las “Misiones Generales” para grandes áreas urbanas. El P. Georges fue uno de los pioneros. Gracias a sus remarcables cualidades intelectuales y a su celo apostólico, fue asumiendo poco a poco el liderazgo, por ejemplo en la Misión General de la zona urbana de Rouen. Escribió un artículo de 30 páginas sobre el concepto de Misión Regional, publicado en 1961 en la revista Missions OMI; en él, da rienda suelta a sus amplios conocimientos de sociología. El concepto actual de “Nueva Evangelización” aún no había nacido, pero los Oblatos ya se habían preparado para él.

Sin embargo, las Misiones Generales no eran una receta mágica. Después de 1830, Eugenio de Mazenod y sus compañeros tenían que innovar, alejándose de su método favorito. En 1965-1966, después del Concilio Vaticano Segundo, los Oblatos se encontraban, una vez más, en un punto de inflexión. Georges Laudin fue puesto al frente de los preparativos para la Misión General del Área Metropolitana de Estrasburgo, un proyecto al que se unieron numerosos institutos religiosos… Pero el proyecto nunca pudo ser puesto en marcha y fue abandonado.

Georges apenas tuvo tiempo para lamentarse por el pasado o por las oportunidades perdidas. Ese mismo año, 1965-1966, tres grandes eventos marcaron su vida:

  1. Fue invitado a Laos a predicar el retiro anual de los Oblatos. En esta ocasión, ayudó a un comité oblato local a preparar una segunda ola de evangelización. Viendo la necesidad de centrarse en las realidades locales de la ciudad de Vientián, comenzaron con la situación social de quienes habían abandonado sus pueblos para intentar ganarse la vida conduciendo los populares “bici-taxis”. Georges les ayudó a hacer balance del panorama general dibujando un cuadro de las distintas clases sociales: un gran esfuerzo que daría sus frutos a largo plazo.
  2. Fue elegido representante de la Provincia OMI del Norte de Francia para el Capítulo general de 1966 – el Capítulo que asumiría la tarea de trasladar la visión del Concilio Vaticano Segundo en toda la Congregación. Georges Laudin tuvo un papel clave en este Capítulo general, especialmente a la hora de elaborar las nuevas Constituciones post-Vaticano II. También fue uno de los editores del comentario oficial de las CCyRR, titulado La Congregación Renovada. Una Guía de Lectura para las Constituciones y Reglas.
  3. El Capítulo general de 1966 nombró al P. Jacques Dherbomez, Provincial del Norte de Francia, como Asistente general. El P. Georges Laudin fue nombrado Provincial para sucederle. Estuvo en este puesto durante dos mandatos, hasta 1972. Una de sus decisiones fue la de mover la Casa provincial fuera de los barrios elegantes de París a los suburbios (Saint-Maur-des-Fossés).

Otros acontecimientos marcaron su mandato como Provincial. El 27 de diciembre de 1967, representó a la Congregación en la misa en memoria del beato Jean Wauthier († 16 diciembre 1967), presidida por el arzobispo de Cambrai. En 1970, firmó un artículo de 38 páginas sobre el desarrollo de la Congregación, publicado en español en la revista Missions OMI. Al año siguiente, su largo informe sobre la Provincia OMI del Norte de Francia fue uno de los documentos más importantes para la preparación del Capítulo general de 1972; también redactó dos artículos de reflexión, publicados en la misma revista, uno sobre “pequeñas comunidades” de cristianos – que más tarde recibirían el nombre de “comunidades de base”-, el otro sobre los desafíos a los que hacía frente el Capítulo general de 1972.

Después de ese Capítulo, Georges Laudin, con todas sus cualidades intelectuales y espirituales, volvió a convertirse en un oblato más “de campo”. El 7 de noviembre, Michel Berche le sucedió como Provincial OMI del Norte de Francia; Georges, que hablaba inglés con fluidez, fue enviado a la isla de Jersey (dependiente de la Corona Británica), donde los Oblatos franceses estaban al frente del ministerio con los trabajadores inmigrantes.

A finales de septiembre de 1977, junto a Yves Chalvet de Récy, abrió una casa interprovincial en Ste-Foy-lès-Lyon para el trabajo pastoral con los jóvenes. Georges fue nombrado capellán del Instituto. Él, junto a Yves, empezaron a recibir en su comunidad de “Chavril” estudiantes que querían compartir su fe con otros de una forma nueva. Rápidamente abrieron las puertas a la presencia de estudiantes extranjeros; luego, en un tercer momento, recibieron también jóvenes mujeres estudiantes. Desde entonces, Chavril permite a oblatos y jóvenes estudiantes, hombres y mujeres, compartir la vida de comunidad durante uno o dos años, encontrarse, descubrir la dimensión intercultural, ver “cómo funciona el prójimo”, y a veces, tener encontronazos, porque la internacionalidad de la vida no siempre es fácil, ¡por no hablar de la personalidad de cada uno!

Geroges Laudin en la Guayana Francesa

En septiembre de 1989, Georges Laudin fue nombrado superior de un nuevo Escolasticado interprovincial, con base en Lyon, 36 rue de Trion.

En octubre de 1993, las tres provincias de Francia iniciaron su proceso de unificación. Georges Laudin recibió el nombramiento como nuevo “Provincial de Francia”. Se puso al frente del proceso de unificación y de la formación primera, y presidió los debates del grupo de Provinciales…

Ese mismo año, 1993, junto al Provincial de Haití, fundó la Misión de la Guayana Francesa, un territorio en el que los Oblatos de Francia ya estaban trabajando con refugiados Hmong.

En 1995, Georges Laudin partió para Asia una vez más, como Provincial de Francia. Guiado por el P. Jacques Nguyễn Văn Thơm, visitó las distintas partes de Vietnam en su camino hacia Hưng Hóa, donde entró en contacto con los Hmong. Su informe subrayó la necesidad de la presencia de Oblatos aquí; pero al mismo tiempo, reconoció la gran dificultad para establecer una Misión en Vietnam. Animó a los oblatos de origen vietnamita o con lazos con este país, a permanecer en contacto y a estar disponibles para echar una mano, dependiendo de las circunstancias.

En septiembre de 1996, al final de su mandato como Provincial, Georges volvió a ser un misionero más: recibió obediencia para la Misión de Guayana. Ahí trabajó sin descanso junto a los Oblatos y a la diócesis; se especializó en la formación de los laicos, y llegó a ser Vicario general durante muchos años. En 2003 escribió un extenso informe sobre esta Misión.

Georges Laudin en la Guayana Francesa

En 2005, Georges Laudin, ahora con 79 años, se puso al frente de Mirza, la parroquia más pobre de la región de Cayena. La parroquia, de unos 20.000 habitantes, contaba con muchos jóvenes que vivían en la calle y albergaba una gran actividad de drogas y prostitución… Su colaborador más cercano era un oblato escolástico de la Provincia de Camerún, que había venido a la Guayana Francesa para una experiencia misionera de dos años. Georges Laudin, además del trabajo parroquial, estaba al frente del catecumenado y de la formación del laicado de toda la diócesis.

En 2012, Georges cumplió los 86 años: y saltaron las primeras alarmas sobre su estado de salud. En 2016 (¡con 90 años!), estos problemas habían empeorado: pérdida de oído, la pérdida gradual de su autonomía personal: le llegaba el momento de volver a la Francia continental. El 29 de mayo de 2018, fue acogido temporalmente en la comunidad de Pontmain, y unas pocas semanas más tarde fue transferido a una residencia para mayores en Fontenay-sous-Bois, a pocos pasos de la casa oblata. Aquí fue cuidado por las Hermanas de San Francisco de Asís, junto al hermano Samuel, un oblato de Pakistán que es asistente de enfermería del instituto. Como la familia de Georges Laudin vive todavía en París, recibía frecuentes visitas de sus sobrinos. Sin embargo, su mente empezó a perderse en otro mundo…

El 21 de abril de 2022, partió para la Casa del Padre, uniéndose a la familia celestial de San Eugenio de Mazenod y de los beatos Oblatos, donde finalmente se ha reunido con su amigo, el beato Jean Wauthier. – D.E.P.

Roland Jacques, OMI
(texto incialmente redactado por los miembros de la Misión OMI de Vietnam)