Nació en Luppy (Moselle) el 22 de julio de 1839
Tomó el hábito en Nancy el 28 de setiembre de 1859
Profesó en Montolivet el 17 de febrero de 1861 (nº 531)
Fue ordenado sacerdote en Autun el 21 de mayo de 1864
Murió en Burdeos el 23 de agosto de 1928.

Eduardo Gandar nació en Luppy, diócesis de Metz, el 22 de julio de 1839. Tras sus estudios secundarios en el seminario menor de Montigny, empezó el noviciado en Nancy el 28 de setiembre de 1859. El maestro de novicios no hace mención de él más que el 28 de setiembre de 1860 y escribe: “Gandar: bastante mediano en cuanto al talento, pero de buen carácter, virtuooso, obediente, bastante fuerte en la salud…” Fue escolástico en Montolivet y allí hizo su oblación el 17 de febrero de 1861. En sus informes, el moderador de los escolásticos, padre Mouchette, escribe en marzo de 1861: “Gandar, excelente, muy regular, un poco petulante, hay en él virtud y buena voluntad, pero también ligereza”. En otoño de 1862 siguió a los escolásticos a Autun, donde fue ordenado sacerdote el 21 de mayo de 1864. Lo que pensaban de él los superiores se resume en el Registro del Personal de 1862-1963, donde se lee: “Muy buen espíritu, mucho buen sentido, inteligencia ordinaria, memoria feliz; carácter tímido, meticuloso en su propio gobierno; dedicación, pero poco entusiasmo. En Francia podría desempeñarse bien con una larga preparación. En las misiones lo hará muy bien sin forzar su talento. En suma, buen sujeto, sólido en la piedad, serio en la conducta”.

Tras su ordenación, el padre Gandar es primero profesor de historia y de dogma en el escolasticado del Sagrado Corazón de Autun de 1864 a 1867. De enero de 1867 a octubre de 1871 es capellán de las Hermanas de la Sagrada Familia en Burdeos, y luego maestro de novicios y ecónomo en Notre-Dame de l’Osier de 1871 a 1882. El padre Augusto Lavillardière, superior de la casa, escribe en el informe de 1880 que hay doce novicios que se forman bajo “la mano suave, firme, discreta y prudente del R. P. Gandar”. El 30 de junio de 1882 éste es nombrado provincial del Mediodía. En el informe de ese año escribe el padre Lavillardière: “El personal de Notre-Dame de l’Osier ha tenido hace tres meses una pérdida muy sensible con la elevación del R. P. Gandar al provincialato. Maestro de novicios, ecónomo y encargado de varios otros oficios, le encontrábamos siempre dispuesto a servir, a suplir, es decir, a llevar las cargas. Sería difícil dejar abiertos a la vez tantos vacíos por el desplazamiento de uno solo. No sé quién de entre nosotros y de nuestros numerosos visitantes o ejercitantes no tendrá que dar mil acciones de gracias, desde hace once años, a los buenos modos, discretos y solícitos del buen padre maestro, como decíamos entonces…”

Siguió de provincial hasta el 22 de junio de 1888. Como provincial, acompañó en 1886 al padre Fabre en su visita canónica de las casas del Mediodía y en 1887 fue a Diano Marina para comprobar los desastres producidos por el terremoto del 23 de febrero, miércoles de ceniza, que causó dos víctimas entre los juniores. Escribe al padre Fabre el 28 de febrero: “Nuestra casa está en el mismo estado que las otras; ni siquiera es prudente entrar en ella para salvar lo que sea de los muebles. Se teme que todo se haya perdido en nuestra casa como en todas partes”. En 1887 el provincial fija su residencia en el Calvario en Marsella. Hasta esa fecha permanecía en l’Osier. El padre Lavillardière lamenta su salida y escribe en un informe: “Era para nosotros un verdadero consuelo, a la vez que una ayuda muy preciosa en los días de afluencia en la peregrinación y durante la ausencia de todos los padres misioneros, la presencia del R.P. Gondar, muy servicial y muy apreciado por todos aquí, especialmente por los señores curas que nos visitaban. ¡Cuántas horas pasadas en el confesionario! ¡cuántas misas tardías! ¡cuántas predicaciones, incluso en el santuario, debidas a su caridad y a su celo!”.

En agosto de 1888 el padre Gandar es nombrado superior del escolasticado de Bleyerheide en Holanda, trasladado a Lieja en Bélgica en agosto de 1891. En el capítulo de 1898 es elegido asistente general y va a residir a la casa general de París, de la que es superior de 1900 a 1906. A la muerte del padre Anger en 1906, es nombrado pro-director de las Hermanas de la Sagrada Familia de Burdeos, puesto que ocupa hasta 1924. Por diversos títulos participó en los Capítulos generales de 1887, 1898, 1904, 1906 y 1908.

Falleció en Burdeos el 23 de agosto de 1928 y fue sepultado en el mausoleo de los Oblatos en Talence. El padre A. Bommenel, su sucesor ante las Hermanas de la Sagrada Familia, escribió a su muerte: “El vacío que deja el R. P. Gandar entre nosotros es muy grande. Ya no estará ahí para edificarnos con sus ejemplos, para dirigirnos con sus consejos tan sabios, para hablarnos de los comienzos de la Congregación, de nuestro venerado Fundador y de nuestros padres antiguos, para rezar y sufrir a favor de las obras de nuestra Congregación y de la congregación de la Sagrada Familia”.

YVON BEAUDOIN, O.M.I.