Nacido en Ferrara el 23 de febrero de 1770, Antonio Pallotta estudió en el seminario de Frascati y en el Colegio Nazareno. Admitido en la prelatura, desempeñó varias funciones en la curia romana antes de ser creado cardenal el 10 de marzo de 1823. Falleció en Monte Cassiano (Macerata) el 19 de julio de 1834.

Era miembro de la Congregación de los Obispos y Regulares en 1825-1826. Amigo del cardenal Pedicini, ponente, éste lo designó como tercer miembro de la comisión nombrada con vistas a la aprobación de la regla. El P. de Mazenod no se encontró con él más que una vez. El 11 de febrero no logró entrar en su casa a causa de su “glacial” doméstico. Se presenta por tres veces en casa de ese “invisible” cardenal, que aún está en la cama cerca del mediodía y no quiere ser visto “con gorro de dormir”. A la tercera visita, el 12, el doméstico no cesa de responderle: “le recibirá el martes”(Cartas a Tempier, 11 y 12 de febrero: Ecrits Oblats, I, t. 7, p. 26s. y 29 [ed. españ. p. 22-24]).

Por fin, recibido el 14, víspera de la reunión de la comisión, el Fundador quedó muy satisfecho de la acogida. Se lo escribe al P. Tempier el 12 de febrero: “Creo haberle dicho que el cardenal Pallotta me había despedido hasta el martes a las diez de la noche. Acudí puntualmente a la cita. Inmediatamente fui introducido en el aposento de Su Eminencia, que me recibió con todas las demostraciones de la más amable cortesía. Me presentó excusas por habérseme obligado a pasar tres veces por su casa, echó la culpa a su chambelán y me mostró el gusto que tenía en conocerme. Me dijo que, aunque no le habían dejado más que dos días para examinar nuestro asunto, se había apresurado a leer de punta a cabo toda la posición, y que estaba muy satisfecho, aunque había hecho algunas leves observaciones que iba a someterme…”

En su carta a los oblatos el 25 de marzo, el Fundador califica al cardenal Pallotta como hombre “de vigoroso talento y de notable erudición”.

YVON BEAUDOIN, O.M.I