Breve semblanza
El Obispo Vidal Justino Grandin nació el 8 de febrero de 1829 en Saint-Pierre-sur-Orthe, en Mayenne, Francia. Vino al mundo gracias a unos padres pobres. A la edad de siete años Vidal sintió el deseo de ser presbítero. Con la ayuda de muchos benefactores su sueño fue cumplido. En 1846 entró en el seminario de Précigné y en 1850 continuó en el seminario mayor de Le Mans. Deseando trabajar en las misiones extranjeras ingresó en la Congregación de los Oblatos de María Inmaculada el 28 de diciembre de 1851. Fue ordenado presbítero en Marsella el 23 de abril de 1854 por el obispo Eugenio de Mazenod, el fundador de los Oblatos.
Poco después salió a las misiones lejanas del Oeste de Canadá. En los años siguientes se entregó enteramente por la conversión de las gentes de las Primeras Naciones y para ayudar a los colonos de las praderas. El P. Grandin sirvió en las misiones del Río Rojo desde donde fue a la Île-à-la-Crosse, Saskatchewan y, en 1855, a Fort Chipewyan, donde permaneció hasta 1857. También visitó las misiones de Fond-du-Lac, Fort Saskatchewan y Fort Resolution en 1857. Regresando a Île-de-la-Crosse fue nombrado obispo de Satala y coadjutor del Arzobispo Alexander Taché, O.M.I. (1823-1894), obispo de San Bonifacio, Manitoba, el 21 de diciembre de 1857. Pero él no recibió la noticia hasta febrero de 1859. Tenía tan solo 29 años de edad. Regresó a Francia y fue consagrado en Marsella el 30 de noviembre de 1859 por san Eugenio de Mazenod.
Cuando regresó al Oeste canadiense vivió en Île-à-la-Crosse (1860-1869) y desde allí emprendía largos viajes a las misiones de Mackenzie (1860-1864), residiendo en Fort Providence (1861-1863) y visitando la misión de Fort Liard (1861) y Fort Simpson (1861-1863). Pasando por dificultades y peligros, viajó incesantemente por toda la vasta región de las praderas esforzándose por la salvación de las almas. Abrazó sus cruces con coraje y un genuino amor por sus hombres. Fue llamado el “obispo andrajoso” por su pobreza y sufrimientos.
En 1869 se estableció en Saint-Albert y trabajó entre los Cree y los Piesnegros. El 22 de setiembre de 1871 fue llamado para ser el primer obispo de Saint-Albert (Alberta). Su campo apostólico consistía en aquel tiempo en unas pocas dispersas misiones y muy golpeadas por la pobreza. Visitó con frecuencia su inmensa diócesis y defendió con energía y eficazmente las escuelas católicas durante la Insurrección de 1885.
Murió en Saint Albert el 3 de junio de 1902. Fue enterrado en la cripta de la iglesia parroquial de Saint-Albert. Puso nombre a muchos lagos, poblados y distritos en el Oeste canadiense y en la Provincia de Quebec.
