ESTADOS UNIDOS

Por el  P. Mark Dean, OMI

Durante el tiempo de la pandemia COVID-19, yo escribí un icono…

Comencé a trabajar en este icono el Jueves Santo, el 9 de abril de 2020. La última pincelada fue en la fiesta de Catalina de Siena, el 29 de abril de 2020.

Como fundamento del icono usé un patrón basado en el icono de la Virgen de la Zarza Ardiente que muestra un icono de María y el Niño Jesús alojados en un árbol en una isla. El árbol tiene hojas con llamas.

He hecho este icono hace algunos años en memoria de mi hermano menor que falleció en 1992. En aquel momento añadí una simple flor de iris en honor de mi hermano. (Cuando le pregunté cuál era su flor favorita, mi hermano respondió que la flor de iris. El interlocutor replicó que las flores de iris son muy bonitas pero desgraciadamente no duran mucho. Mi hermano que estaba en sus últimas semanas de vida, replicó, “y esto es lo que dirán de mi…” Jim Dean, no duró mucho pero fue bello mientras estuvo aquí).

El icono de la Virgen de la Zarza Ardiente hace referencia a la historia de Moisés y la zarza… que ardía pero no se consumía. La Iglesia primitiva vio esto como un símbolo de María y el nacimiento virginal… ella dio a luz permaneciendo virgen. Uno de los primeros cambios que hice con respecto a este patrón fue usar como imagen principal de María la del icono de Nuestra Señora de la Ternura tal como se exhibe en el icono de Nuestra Señora de Vladimir, quizás el más famoso modelo de este estilo. También introduje en el icono los dos ángeles representados en el icono de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

P. Mark Dean, OMI

En la aureola de María están incluidas doce estrellas abstractas. Solo nueve son visibles porque tres están ocultas tras María y el Niño Jesús. Aunque las estrellas no son raras en los iconos de María, estas estrellas quedaron emplazadas como referencia a María, Madre de la Divina Misericordia.

En el primer plano añadí un campo de flores de iris que para mí son un símbolo de nuestro querido difunto… que aunque esté fuera de nuestra vista, no está fuera de nuestro corazón, de nuestra mente o de nuestro alcance. Por último, en referencia a la pandemia Covid-19, emplacé un símbolo del coronavirus en la cruz que porta el ángel de la derecha… y más tardé añadí un murciélago en referencia a los presuntos orígenes del virus. La oración que escribí para este icono es:

Nuestra Señora de la Ternura, Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, Madre de la Divina Gracia, intercede por nosotros ante Dios para bendecir y ayudar a todos los que están afligidos y afectados por la pandemia del Coronavirus. Que todos los que contemplen esta imagen conozcan el toque sanador de Dios. Amén.