Nacimiento en Metz (Mosela) el 18 de abril de 1821
Ordenación sacerdotal en Metz el 31 de agosto de 1845
Toma de hábito en Nancy el 24 de marzo de 1859
Oblación en Nancy el 25 de marzo de 1860 (nº 500)
Muerte en Saint-Hélier, Jersey, el 24 de julio de 1894.

Donato Michaux nació en Metz el 18 de abril de 1821. Hizo los cursos de secundaria en la institución del abate Bureaux, estudió la teología en el seminario mayor de Metz y fue ordenado sacerdote el 31 de agosto de 1845. Por cinco años ejerció el ministerio como vicario en la parroquia de Santa Segolena. De común acuerdo con el general Randon, fundó en 1848 la obra de los militares, que dirigió durante algunos años. Nombrado canónigo a los 32 años, no quiso comprometerse en una canonjía y en el ministerio ordinario de una parroquia o de una obra. Se hizo misionero, predicando retiros y misiones desde 1853 a 1859. A la muerte de su madre entró en el noviciado de Nancy el 24 de marzo de 1859. El P. Guinet, maestro de novicios, escribe en sus notas de marzo de 1859: “Michaux está formado en la vida misionera por la práctica que ha tenido. Tiene experiencia y todo lo que hace falta para atraer y triunfar… La Providencia lo ha puesto como en la necesidad de buscar el descanso y la vida interior en la vida religiosa. El nos ha escogido. Es feliz desde que está con nosotros. Acostumbrado a hacer su voluntad, se somete como un niño…” Y en abril añade: “Michaux está cada vez más contento y feliz. Nos ayuda mucho para el ministerio exterior que es para él como una necesidad. Con todo, su sumisión y su observancia del reglamento del noviciado son edificantes. Temperamento nervioso en sumo grado, el tiempo y la abstinencia influyen en su moral… Me obedece y me respeta y me abre su corazón como un niño. Esto me hace creer en su perseverancia”.

Después de su oblación, el 25 de marzo de 1860, el P. Michaux quedó en Nancy como predicador. Durante la guerra de 1870 fue capellán de los soldados en Lieja y luego, a su regreso, recibió la obediencia para Nuestra-Señora de Sion donde trabajó por diez años. En 1880 preparó en Schonau, Suiza, un asilo para los juniores expulsados de Francia y permaneció con ellos hasta 1882.

Valiente misionero e incansable buscador de recursos: esos son los dos rasgos característicos del P. Michaux. Cuando se presentaba en medio de una población como misionero, leemos en su nota necrológica, “con su hermosa prestancia, sus modales distinguidos y su exterior simpático, causaba profunda impresión y disponía en su favor a los más indiferentes; así reportó notables éxitos”. Había recibido de Dios también un don extraordinario para conseguir ayudas. Gracias a los donativos que recibió, sus hermanos pudieron terminar la construcción de la capilla de Nancy y la torre de N.-S. de Sion y construir allí un juniorado.

En 1882 fue enviado a Jersey donde permaneció hasta la muerte. El autor de su nota escribe: En Jersey el P. Michaux “se ocupó de dos obras principales, llevándolas adelante con su celo y su ardor habituales, a pesar del peso ya serio de sus años. Dirigió un juniorado, para reclutar y educar las vocaciones tardías, y desplegó el mayor empeño para procurar a esa obra los recursos necesarios. Luego, proveyó a la construcción de una iglesia para nuestra parroquia de Santo Tomás, en la ciudad de Saint-Hélier. La obra era sumamente ardua, pero él desplegó tal actividad y dio prueba de tal dedicación que pronto Santo Tomás se vio dotado de una vasta iglesia monumental , la más bella de toda la isla, llamada comúnmente la catedral, que costó más de 700.000 francos. Esto puede dar idea de la extraordinaria popularidad de que gozaba el P. Michaux, de la simpatía y la confianza generales que lo rodeaban dondequiera que llevaba la palabra y extendía la mano”. Murió de repente, arrodillado en su reclinatorio la mañana del 24 de julio de 1894, a los 74 años.

YVON BEAUDOIN, O.M.I.