Nacimiento en Agnin (Isère), Agosto 2, 1827.
Toma de hábito en N.-D. de l’Osier, Septiembre 16, 1852.
Oblación en Marsella, Marzo 19, 1853 (no. 345).
Muerte en Roma, Basutolandia, Enero 5, 1889.

Pedro Bernard nació en Agnin en la diócesis de Grenoble, el 2 de agosto de 1827. En una carta al Padre José Fabre fechada Noviembre 9, 1862, relataba la historia de su vocación. A los 18 años de edad, después de leer algo de literatura religiosa, en particular los Anales de la Propagación de la Fe, sintió el deseo de convertirse en misionero. A los 20 años, esperaba convertirse en soldado para poder salir de la casa paterna. Fue uno de los elegidos en los sorteos de reclutamiento, pero su padre encontró quien lo reemplazara. A los 23 años anunció que saldría a las minas de oro de California, lo que ocasionó disgusto en la familia, y su padre se rehusó a darle el dinero que necesitaría para el viaje. Después dijo a sus padres que si se oponían a su viaje a California, al menos le permitieran ir a un monasterio. Como resultado, se unió a los Hermanos de las Escuelas Cristianas en el noviciado de Caluire cerca de Lyons y después de ocho meses como novicio, fue a catequizar en Lyons. Pero siempre tuvo el deseo de ir a las misiones. En 1852, le permitieron contactar a algunas congregaciones. Eligió a los Oblatos, ingresando al noviciado en Notre-Dame de l’Osier el 16 de septiembre de 1852. El Padre Richard, maestro de novicios, escribió en sus notas acerca de los novicios a fines de septiembre de 1852: “El Hermano Pedro Bernard, nacido el 2 de agosto de 1827, recibido [como novicio] el 16 de septiembre de 1852… De buen carácter, buen trabajador, buen religioso, muy sensible.” Las notas de los meses siguientes tuvieron también comentarios positivos. En diciembre encontramos: “Es modelo para los hermanos laicos, siempre muy trabajador, muy abierto a las instrucciones, comprende el espíritu religioso, tiene una auténtica vida de oración…”

A principios de 1853 el Obispo de Mazenod envió algunos misioneros al Obispo Allard en Natal. El Hermano Bernard fue elegido antes de terminar su noviciado, junto con el Padre Justin Barret y el hermano escolástico José Gérard. El Hermano Bernard salió de Osier, tomó sus votos en Marsella el 19 de marzo, se embarcó de Toulon el 10 de mayo y llegó a Pietermaritzburg ocho meses más tarde. Trabajó como cocinero, jardinero y mozo. El Obispo Allard le asignó hacer ladrillos. En 1858-1859, construyó la capilla de misión de San Miguel, con los Zulu.

En 1862, salió para Basutolandia con el Obispo Allard y el Padre Gerard. Su trabajo fue la construcción de la misión de María, Madre de Jesús en Roma, y supervisó las provisiones de la misión, cultivó la tierra y también fue el primer maestro en la escuela para niños. Falleció en Roma, Basutolandia, el 5 de enero de 1889. El Padre Federico Porte escribió al Padre Soullier, asistente general, el 8 de marzo de 1892: “A menudo usted nos comentaba, Reverendo Padre, lamentar nunca haber conocido al Hermano Bernard, a quien todos alababan. Comprendemos bien por qué. Este hermano fue un consumado hombre dedicado, modelo de los hermanos laicos, un inteligente hermano que se enfocaba sólo a la tarea recibida, que hacía bien su trabajo, siempre pidiendo poder hacer más. Las lágrimas vienen a los ojos de todos nosotros, al recordar que el día anterior a su muerte, exhausto por tres meses de enfermedad, el Hermano Bernard pidió ser llevado en la carreta de la misión para ajustar un perno en la rueda del molino, porque decía “lo que me hace sufrir es ver que los sacerdotes ya no tienen harina”. Tal dedicación es heroica, es digna de alabanza; algo que debemos imitar”. (Missions O.M.I., 30 (1892), pp. 216-217)

Yvon Beaudoin, o.m.i.