1. Profesor y educador
  2. Provincial del Sur (1871-1876)
  3. Enfermedad y muerte

Nacimiento en Marcilloles (Isère), 7 de octubre, 1823
Toma de hábito en N.-D. de l’Osier, 14 de agosto, 1848
Oblación en N.-D. de l’Osier, 15 de agosto, 1849 (n° 259)
Ordenación sacerdotal en N.-D. de l’Osier, 19 de agosto, 1849
Provincial del Sur (1871-1876)
Muerte en N.-D. de l’Osier, 13 de marzo, 1879.

Juan Bautista Berne nació el 7 de octubre de 1823 en Marcilloles, diócesis de Grenoble; comenzó el estudio del latín con uno de sus tíos, párroco de Mottier. Estudió retórica y filosofía en el seminario menor de Rondeau y teología en el seminario mayor de Grenoble. Después de haber recibido el diaconado, entró al noviciado de Notre-Dame de l’Osier, el 14 de agosto de 1848 e hizo allí su oblación ante el Fundador, el 15 de agosto de 1849. Durante esa visita a l’Osier, Mons. de Mazenod lo ordenó sacerdote el 19 de agosto siguiente.

Profesor y educador

La primera obediencia lo designa como profesor de dogma en el seminario mayor de Ajaccio. Mons. Casanelli d‘Istria lo encuentra muy joven y muy tímido. El joven padre da a conocer estas reservas del obispo de Ajaccio al Fundador que responde el 25 de noviembre de 1849: “Todo necesita un comienzo y cuando se posee un caudal de conocimientos como el suyo, la sensatez, reserva y modestia que nadie le discutirá, junto a la suavidad y a las otras cualidades que yo le reconozco, no hay que inquietarse por las decisiones que se toman, ni por la responsabilidad que se asume…”

Aquejado de un reumatismo articular en la primavera de 1851, es llamado a Marsella como colaborador del padre Vincens, responsable del “gran curso” que se inició por entonces en el Calvario, con el objetivo de formar mejor a los sacerdotes jóvenes para la predicación. Durante el verano de 1851, predica también algunas veces en la capilla del Calvario y da algunos retiros. La debilidad de su voz no le permite tomar parte en las misiones parroquiales.

El padre Berne enseña dogma en el seminario mayor de Fréjus de 1851 a 1854, y luego moral en el seminario mayor de Romans de 1855 a 1857. En 1855, es nombrado también consultor ordinario de la segunda provincia de Francia. En el mes de octubre de 1857, el padre Guinet, maestro de novicios de Nancy, cae enfermo y el Fundador lo reemplaza con el padre Berne. Gustavo María Simonin, por entonces sacerdote novicio, escribe de él: “La apariencia del padre Berne era simpática; una fisonomía abierta y sonriente, y una voz suave y débil hacían que ni el más tímido pudiera temerle. De mediana estatura, de una constitución frágil, el padre Berne a su llegada nos pareció, en su actitud y en su porte, como el humilde religioso formado según las exigencias de la modestia regular. En su amplia frente, se leía el hábito del pensamiento serio y en el conjunto de sus rasgos faciales, el olvido de sus cualidades, la austeridad de su amable virtud y, sobre todo, una gran dulzura…”

En el año 1858, el padre Berne es destinado como profesor de moral en Fréjus, donde permanece hasta 1867. De 1867 hasta su muerte, vive en Nutre-Dame de l’Osier, como maestro de novicios de 1867 a 1871 y como provincial del Sur, de 1871 a 1876.

Provincial del Sur (1871-1876)

En 1871, la administración general designa en la provincia al padre Berne como sucesor del padre Bermond, provincial que había llegado al término del cargo. “Este nombramiento fue recibido con favor unánime, escribe el padre Fabre, y con gran asombro, y podríamos decir con gran espanto, por el padre Berne, que se vio lanzado a una carrera administrativa para la cual, según él, era completamente inepto e incapaz. El resultado no tardó en ofrecer el más feliz desmentido a las resistencias de su humildad. Fue un perfecto provincial, muy puntual en visitar las casas a su cargo y en tener correspondencia con sus súbditos, muy atento a hacer observar la regla y a mantener en todas partes en su integridad nuestras santas observancias. Justo y bondadoso con todos, nadie pudo reprocharle haber actuado con prejuicios o con parcialidad. Su gran bondad, sin embargo, no cayó en la debilidad y mantuvo la firmeza en el cumplimiento de los deberes de su cargo. El fervor de los buenos religiosos le encantaba. El relajamiento de algunos le causaba una cruel preocupación…”

Como provincial, el padre Berne participa en Autun en el retiro de los superiores, en agosto de 1872 y en el Capítulo general en julio-agosto de 1873. En 1874, publica su obra Esquisse sur le pèlerinage de Notre-Dame de l’Osier (Grenoble 160 p.).

Enfermedad y muerte

En 1876, durante una visita a las casas del sur, el padre sufrió una enfermedad de nervios al lado izquierdo de su rostro. Según escribe el padre Lavillardière, “el infortunado paciente sentía que le laceraban las mejillas con zarpas de acero, de tal modo los nervios se retorcían en horribles convulsiones”. Operado en Lyon se recupera. Habiendo logrado que se le liberara de sus funciones de provincial, fue nombrado superior de Notre-Dame de l’Osier en 1877, luego superior del escolasticado de Autun a comienzos de 1878. Durante el verano su neuralgia repite. Nuevamente operado en Lyon en julio, vuelve a Notre-Dame de l’Osier, donde muere el 13 de marzo de 1879. Al día siguiente, el maestro de novicios anuncia el fallecimiento al padre Fabre diciendo lo siguiente: “Hasta el último momento, se mostró tal como yo le decía en mis anteriores cartas, no solamente sometido a la voluntad de Dios, sino incluso lleno de alegría ante el pensamiento de la muerte…” Su cuerpo descansa en el cementerio de la comunidad de Notre-Dame de l’Osier.

YVON BEAUDOIN, O.M.I.