Nacimiento en: Saint-Pierre-la-Cour (Mayenne), Febrero 8, 1829.
Toma de hábito en: N.-D. de l’Osier, Diciembre 28, 1851.
Oblación en: N.-D. de l’Osier, Enero 1°, 1853 (No. 338).
Ordenación sacerdotal en: Marsella, Abril 23, 1854.
Ordenación episcopal: Marsella, Noviembre 30, 1859
Muerte en Saint-Albert, Canadá, Junio 3, 1902.

 

Vital Justino Grandin nació el 8 de febrero de 1829 en Saint-Pierre-la-Cour, ahora llamado Saint-Pierre-sur-Orthe, en la diócesis de Le Mans, Francia. Sus padres fueron Juan Grandin y María Veillard. Su padre era granjero, pero después trabajó como hotelero y carnicero. Siendo aún niño, la familia se mudó a Aron. Estudió en el seminario menor en Précigné de 1846 a 1850 y realizó sus estudios de filosofía y algo de teología en el seminario mayor de Le Mans en 1850-1851. En septiembre de 1851, esperando ir al oriente como misionero, solicitó ingresar al seminario de las Misiones Extranjeras en París, pero fue rechazado por un defecto del habla. Después fue admitido en Notre-Dame de l’Osier, comenzando su Noviciado el 28 de diciembre de 1852. Su maestro de novicios, el Padre Gustavo Richard, escribió lo siguiente sobre él: “Su defecto de pronunciación no me parece tan grave. Al leer es casi imperceptible… De buena salud, estatura y porte bastante distinguido, gran virtud, le será difícil prepararse para la vida religiosa, de buen carácter, aunque algo serio… muy buen juicio, poca o nula imaginación, inteligencia promedio, gusta de trabajar… Creo está llamado a ser un buen religioso.” Los reportes mensuales del Padre Richard siempre lo alaban. En julio de 1852 escribe de nuevo: “Grandin, un joven santo… los provenientes del seminario de Le Mans son únicos en el mundo.”

El novicio pronunció sus votos en Notre-Dame de l’Osier el 1° de enero de 1853, estudió teología en Marsella en 1853-1854, el Obispo de Mazenod lo ordenó sacerdote el 23 de abril de 1854 y recibió su primera obediencia para Red River. El 26 de mayo de 1854, el Fundador escribe al Padre Francisco Bermond en Saint-Boniface: “Le envío a un excelente sacerdote, el Padre Grandin. Tiene todas las virtudes y cualidades para hacerlo un buen misionero y sale con tan buena voluntad y dedicación que es imposible que Dios no lo utilice para hacer bien en la misión a la que su bondad le ha llamado. No enviaría a un misionero a quien no le interesaran las misiones de tanta dificultad… Esta vez, el Padre  Grandin fue el único voluntario sin preocupación por el rigor del clima.” En una carta al Obispo Taché el 28 de mayo, añadió: “Le envío un ángel en la persona del Padre Grandin … Con alegría se presenta ante usted para la difícil misión, es un alma generosa, como las que del tipo que necesita…”

Misionero y Obispo coadjutor en Saint-Boniface
Al principio el Padre Grandin fue enviado a Île-à-la-Crosse, después a Fort Chipewyan, donde trabajó de 1855 a 1857 y a Fond-du-Lac, Athabaska en 1857. En 1855, el Obispo  Taché solicitó a Propaganda un coadjutor, que fuera responsable de las Misiones alejadas, en el Norte. Solicitó la opinión del Obispo de Mazenod y después la del Obispo Guigues de Ottawa. Ambos mencionaron al Padre Grandin, a pesar de solo tener 28 años de edad. El 11 de diciembre de 1857, el Papa Pío IX lo nombró Obispo titular de Satala y coadjutor de Saint-Boniface, con residencia en Île-à-la-Crosse. El Obispo de Mazenod escribe el 8 de enero de 1858 al Padre Grandin para anunciarle su nombramiento, y entre otras cosas, le dice: “Una pequeña carta a nuestro querido Padre Grandin, quien por voluntad de Dios y de su representante en la tierra, se ha convertido en Obispo titular de Satala … Desde donde me encuentro puedo verlo postrarse en tierra y derramar lágrimas en su humildad, rechazando la corona pontificia que se coloca sobre su frente. Tenga la seguridad que le es impuesta por obediencia y además, para usted, en medio de su difícil labor, le parecerá más la corona de espinas del Salvador, que la diadema de un emperador de este mundo. Es usted obispo por la voluntad del líder de la Iglesia y la mía; cuente con la gracia y la ayuda de Dios. El episcopado se ha convertido en su camino de salvación…” La noticia fue recibida en Le Mans con asombro y el Obispo de Mazenod recibió algunas cartas al respecto. Escribió a uno de los colegas del obispo electo el 9 de enero de 1858: “Aunque es aún joven, el Padre Grandin merecía ser elegido. Para poder llevar la pesada carga que se ha colocado en él, necesita de gran virtud y un valor impávido, cualidades precisas que Dios ha prodigado a este querido prelado. Aun siendo tan joven, siempre ha sido un modelo en todos los puestos donde ha sido colocado. Con plena confianza, el Obispo de Saint-Boniface y yo lo presentamos ante la Santa Sede para que coloquen sobre su frente esa corona de espinas que tendrá la fortaleza para llevar.”

El Obispo Grandin se enteró de su nombramiento en junio de 1858 y fue ordenado obispo por el Obispo de Mazenod el 30 de noviembre de 1859, en la iglesia Holy Trinity en Marsella. Como lema Episcopal eligió: Infirma mundi elegit Deus. A su regreso a Île-à-la-Crosse recibió la visita del Obispo Taché. Juntos estudiaron la posibilidad de establecer un Vicariato apostólico en la cuenca del Mackenzie. Con ello en mente, el Obispo Grandin visitó durante 1861-1864, Fort Providence, Fort Liard, Fort Good Hope, Fort Rae y Fort Simpson. Al regresar a Île-à-la-Crosse en 1864, se enteró que el 13 de mayo de 1862, el Padre Enrique Faraud había sido nombrado Vicario apostólico de Athabaska-Mackenzie.

De 1864 a 1867, el Obispo Grandin visitó las misiones en la región de Churchill. En 1867 asistió al capítulo general de los Oblatos en Autun, y al consejo provincial en Quebec en 1868. En 1869 comenzó a residir en Saint-Albert, cerca de Fort Edmonton al norte de las praderas, donde trabajó con los amerindios Cree y Blackfoot.

Vicario de misiones y Obispo de Saint-Albert
En 1868 el Padre Fabre nombró al Obispo Grandin como superior religioso de los Oblatos en el vicariato de la misión de Saskatchewan, puesto en el que permaneció hasta 1897. El 22 de septiembre de 1871, fue nombrado Obispo de Saint-Albert. Visitaba a menudo su vasta diócesis, encontrando muchos problemas, en especial la pobreza en una diócesis donde todo debía hacerse y que se desarrollaba rápidamente con la llegada de muchos inmigrantes. También tuvo que analizar cómo manejar el futuro y el problema de educar a los mestizos e indios, ante la presencia de los inmigrantes. Se acercó a los diferentes gobiernos en defensa de los derechos de los mestizos, aunque no alentó su rebelión en 1885. Viajó a Ottawa en 1882, 1883, 1886 y 1887 para luchar por los derechos de los mestizos e indios. Buscando personal y fondos, viajó a Francia en 1867, 1873, 1876 y 1893 y al este de Canadá y los Estados Unidos en 1877, 1888 y 1901.

El deseo del Obispo Grandin era establecer una iglesia nativa. Envió jóvenes a estudiar en el colegio en Saint-Boniface y en los seminarios de la provincia de Quebec. El 21 de enero de 1900 estableció el seminario menor Holy Family en Saint-Albert. Solo tuvo el consuelo de ordenar a un mestizo en 1890: Eduardo Cunningham.

Al envejecer, el Obispo Grandin sufrió de infecciones del oído y abscesos. En 1897 Roma nombró al Obispo Emilio Legal como coadjutor de Saint-Albert. Sin embargo, el Obispo Grandin continuó realizando sus funciones hasta su muerte, el 3 de junio de 1902. Sus restos descansan en la catedral de Edmonton. La causa de beatificación fue presentada en Roma el 27 de febrero de 1937 y el Papa Paulo VI lo declaró Venerable el 15 de diciembre de 1966.

Yvon Beaudoin y Gastón Carrière, o.m.i.