Nacimiento en Domène (Isère) el 20 de febrero de 1829
Toma de hábito en N.-S. de l’Osier el 14 de agosto de 1847
Oblación en N.-S. de l’Osier el 15 de agosto de 1848 (n. 206)
Ordenación sacerdotal en Marsella el 27 de junio de 1852
Muerte en Burdeos el 11 de diciembre de 1894.

Amado Martinet nació en Domène, diócesis de Grenoble, el 20 de febrero de 1829. Tras unas semanas de estudios secundarios en el juniorado de N.-S. de Lumières, entró en el noviciado de Nuestra-Señora de l’Osier el 14 de agosto de 1847 e hizo su oblación el 15 de agosto de 1848. Al entrar en el escolasticado, entonces en el seminario mayor de Marsella, le acompañaban estas notas: “El hermano Martinet es un hombre bueno bajo todos los aspectos; está lleno de virtudes y de talentos, de un carácter muy afortunado, de una virtud muy sólida, de una regularidad perfecta; además se deja conducir muy fácilmente; posee recursos muy por encima de lo ordinario y está dotado de una voz deliciosa”. No obstante, en el consejo general se habían tenido dudas para admitirlo a la profesión. Dice el acta de la sesión del 7 de agosto: “El Padre Martinet sería un sujeto cumplido si no hubiera en él cierta deficiencia natural que hace temer no se le pueda emplear en algo exterior. Es la exigüidad de su talla y las canijas proporciones de su cuerpo, que son tales que nunca tendrá la apariencia de un hombre hecho”.

Tras ser ordenado sacerdote por Mons. de Mazenod el 27 de junio de 1852, el P. Martinet es destinado a la enseñanza en los seminarios: profesor de filosofía en el seminario de Fréjus en 1852-1853, en el de Marsella de 1853 a 1855, y en el de Romans en 1856-1857; profesor de dogma en Marsella en 1855-1856 y de 1857 a 1862. Cuando, en 1862, los escolásticos deben dejar Montolivet para ir a Autun, el Padre Martinet, amigo y hombre de confianza del P. José Fabre, superior general, es puesto al frente de esa importante comunidad.

En el Capítulo general de 1867, sin ser capitular, es elegido cuarto asistente y secretario general. No dejará este puesto hasta su muerte, durante 27 años: tercer asistente y secretario en 1873 y 1879; segundo asistente y secretario en 1887; primer asistente y admonitor del superior general en 1893. Como asistente, efectúa la visita canónica de los oblatos de Africa del Sur en 1871-1872, de la provincia británica en 1875, de Columbia Británica en 1882, y del Este de Canadá en 1891. Es vicario general durante el viaje del P. Luís Soullier a América en 1894. En 1870 Mons. Bonjean, vicario apostólico de Jaffna, le designa para representarle en el Concilio.

El autor de su noticia necrológica escribe: “El P. Martinet no dejaba su celda más que por deber “para cumplir las misiones que se le confiaban, o para llevar a almas religiosas los favores de su dirección firme y elevada. Por lo demás, si gustaba de las dulzuras de la celda, eso no quiere decir que allí estuviera desocupado. Se entregaba, al contrario, a un trabajo de pluma incesante, ininterrumpido, capaz de exasperar los nervios más sólidos y de fatigar las voluntades más tesoneras. Y, si no se dio al ministerio de la predicación, esa actividad de la celda, tan escondida y tan dura, no contribuyó menos al bien de la Congregación y de las almas, como a la gloria de Dios. ¡De cuántos misioneros compartió, por decirlo así, el apostolado, animándoles, consolándoles, fortaleciéndoles con sus observaciones tan paternales y tan firmes, con sus decisiones tan seguras y tan oportunas! ¡Cuántos oblatos le deberán tal vez en parte su salvación, porque afianzó su vocación y aseguró sus pasos vacilantes!

Poco después de su elección como asistente general, una enfermedad del corazón le obliga a disminuir poco a poco su trabajo, y luego a tomar un descanso completo en Burdeos, donde es cuidado por las Hermanas de la Sagrada Familia. Muere el 11 de diciembre de 1884 a los 67 años.

YVON BEAUDOIN, O.M.I.