A lo largo de la vida del Fundador, la predicación de misiones fue una parte importante en la vida de los Oblatos que fueron enviados al extranjero. En 1853, el P. Rooney, Pastor de la parroquia St. John en Plattsburgh, New York ubicada al norte del Estado, buscando atender las necesidades espirituales de los franco-canadienses que se habían establecido en el área, solicitó a los Oblatos una predicación. En junio de ese año tres Oblatos llegaron para predicar la Misión: Padres Juan Pedro Bernard, Francisco Toussaint Rouisse y José Royer; interesantemente, se realizó en una iglesia universalista de madera, que se rentó para el evento en $100.00.

La Misión de dos semanas hizo notar las grandes necesidades pastorales de la población de habla francesa del área. Se reporta que durante las dos semanas, además de predicar y oficiar Misas, los tres Oblatos escucharon 1,600 confesiones, realizaron o bendijeron 40 matrimonios y administraron 50 bautizos.

Plattsburgh, Rectoría e Iglesia (AD)

Después de la Misión, los franco-canadienses del área enviaron a una delegación de 25 personas a Montreal para convencer a los Oblatos de volver y establecer una residencia permanente en su “villa americana”. La solicitud fue apoyada por el Obispo McCloskey de  Albany, quien posteriormente sería el Cardenal Arzobispo de New York.

La solicitud fue analizada en la reunión del Consejo Provincial del 7 de julio de 1853, considerando una respuesta favorable. Entre los motivos a favor estaban: la evidente necesidad de atender a la población que ya era numerosa y seguiría creciendo; su cercanía a Montreal (solo 88 kms, contrario a la misión de Buffalo, que estaba a 504 kms de distancia); la solicitud de también trabajar con los católicos en la cercana Redford, que justificaba enviar a dos Oblatos y la posibilidad de también hacerse cargo de la iglesia de habla inglesa en el futuro, que garantizaría la oportunidad de una vida comunitaria regular y suficiente trabajo. El 28 de julio de 1853 se firmó un acuerdo entre los Oblatos y el Obispo de Albany.

A escasamente tres meses de haber llegado como parte del grupo de predicación, el P. Bernard llegó a Plattsburgh el 28 de agosto de 1853. Pronto se le unió el P. Sallaz. El primer lugar de culto de la recientemente erigida comunidad de habla francesa en Plattsburgh fue ni más ni menos que la iglesia universalista que se había rentado para la Misión en junio.

Casi de inmediato se inició la construcción de una iglesia, aunque hubo que suspenderla debido al crudo invierno. Aunque las condiciones climáticas hicieron imposible continuar la construcción, se siguieron trayendo por trineo los materiales necesarios. La construcción se concluyó en la primavera de 1854 y el 29 de junio de 1855 el Obispo Guigues, o.m.i.  consagró y dedicó la iglesia a St. Peter. Los registros muestran que en 1856 había 150 comulgantes y en 1857, el Obispo McCloskey hizo quinientas confirmaciones.

Las visitas del área realizadas por los Oblatos ese primer invierno, mostraron que había doscientas familias católicas en Plattsburgh mismo y cuatrocientas en las regiones circundantes, donde los Oblatos también cuidaron de las necesidades espirituales de los fieles.

En 1860 se hizo realidad la esperanza de los Oblatos de también trabajar algún día en St. John (iglesia irlandesa). Al fallecer el Padre Rooney, quien había invitado a los Oblatos por primera vez a Plattsburgh, la parroquia quedó a cargo de otro sacerdote diocesano que hubo de ser reemplazado poco después. El 1° de junio de 1860, el P. Molony fue nombrado primer Pastor Oblato de la parroquia, donde permaneció hasta 1879 y construyó una nueva iglesia para St. John.

Cuando el P. Molony fue enviado a Buffalo en 1879, el Obispo Edgar P. Wadhams, D.D., de Ogdensburg, (diócesis erigida en 1872), decidió dejar St. John a cargo del clero diocesano nuevamente. El Obispo decía que ese había sido el acuerdo, lo que el Provincial Oblato, P. Antoine, o.m.i. impugnó. Cuando los feligreses solicitaron que los Oblatos permanecieran, el Obispo accedió, con la condición de que el P. Molony continuara como pastor. Los Oblatos no aceptaron la condición. Los Oblatos continuaron trabajando en Plattsburgh, esta vez en St. Peter, hasta 1990.

Se menciona que el acuerdo original entre los Oblatos y la Diócesis de Albany fue que también trabajaran con los católicos de Redford de forma mensual. El P. Sallaz estuvo a cargo de la misión, donde se realizaron los primeros Bautismos el 4 de septiembre de 1853. Los Oblatos supervisaron la construcción de una nueva iglesia, que se consagró el 15 de agosto de 1854 y continuaron su tarea en el lugar hasta 1869.  Durante su estancia en  Redford, el registro de la parroquia indica que los Oblatos bautizaron 1,425 niños y/o adultos y celebraron 206 matrimonios.

De 1853 a 1869 los Oblatos también estuvieron a cargo de la comunidad católica de  Dannemora, donde se localizaba la prisión estatal. Los Oblatos se encargaron de la construcción de la primera capilla en el lugar y más adelante de una iglesia, consagrada por el Obispo Guigues, o.m.i., en 1862. Además de atender a los feligreses, los Oblatos también fueron capellanes en la prisión en Dannemora.

Los Oblatos de Plattsburgh trabajaron además en las comunidades vecinas de Cadyville, hasta 1878, Morrisonville (hasta 1883), Neap City (hasta 1883), Schuyler Falls hasta 1886 y Rand Hill hasta 1884.

Hank Lemoncelli, o.m.i.