Nacimiento en Pradelles (Alto Loira), el 5 de noviembre de 1801.
Ordenación sacerdotal hacia 1826.
Toma de hábito en Notre Dame de l’Osier, el 14 de octubre de 1850.
Oblación en Notre Dame de l’Osier, el 15 de octubre de 1851 (nº 312).
Abandono de la Congregación hacia 1860.

Bruno Séjalon nació en Pradelles, diócesis de Puy, el 5 de noviembre de 1801. Fue ordenado sacerdote hacia 1826, ejerciendo su ministerio sacerdotal en la diócesis de Valence durante cinco años y más tarde en la de Viviers durante nueve años. Ingresó en el noviciado el 14 de octubre de 1850, haciendo allí su oblación el 15 de octubre de 1851. Fue admitido a los votos en la sesión del Consejo General del 5 de octubre de 1851 por recomendación del P. Richard, Maestro de Novicios, quien escribió: “Es humilde, de sencillas maneras, tiene un profundo amor por su vocación y [es] capaz de hacer un gran bien”.

Fue enviado inmediatamente a Notre Dame de Bon Secours, donde, en 1851-1852, compartió la predicación de una misión con el P. Martín. Éste, por su parte, admitió que preferiría no tenerle consigo. Su “forma [de predicar] no es bien recibida, aunque es una persona virtuosa”. Durante el verano de 1851, el P. Séjalon fue para atender las clases de predicación del P. Vincens, en los “cursos superiores” de Marsella, recibiendo después obediencia para Notre Dame de Talence. El P. Dassy, superior, no hace ningún juicio de él como predicador, pero refleja que en la vida comunitaria el P. Séjalon es obstinado, demasiado brusco, falto en la disciplina; estaba haciendo mucho daño al P. Depietro. En 1855, el obispo de Mazenod pensaba enviarlo a Nancy al ministerio de las cárceles, pero desistió de esta idea porque, como escribió al P. Vincens el 20 de mayo: “Este Padre no se llevará bien con el Superior que le será designado”

El P. Séjalon vivió después en Notre Dame de Cléry de 1855 a 1859 y más tarde en Notre Dame de Sión de 1859 a 1860. Trabajó como predicador de misiones y sustituyó ocasionalmente a algunos párrocos. En septiembre de 1859, escribió al P. Vincens para quejarse de la pobreza de la comunidad. Probablemente abandonó la Congregación en 1860. Desde entonces su nombre no aparece en las fuentes oblatas.

Yvon Beaudoin. o.m.i.