Nacimiento en: Popéringue, Bélgica, Agosto 3, 1826.
Toma de hábito en: N.-D. de l’Osier, Octubre 31, 1847.
Oblación en: N.-D. de l’Osier, Noviembre 1°, 1848 (N. 216).
Ordenación sacerdotal en: Marsella, Mayo 25, 1850.
Muerte en: Brownsville, Texas, Agosto 28, 1882.

 

Florente Vandenberghe nació en Popéringue, diócesis de Bruges, Bélgica, el 3 de agosto de, 1826. Sus padres fueron Benito Vandenberghe y Amelia Bovery. Al concluir sus estudios en el colegio de Ostende y dos años en el seminario mayor de Bruges, inició su noviciado en Notre-Dame de l’Osier el 31 de octubre de 1847, donde tomó votos el 1° de noviembre de 1848. Continuó dos años más en el seminario mayor de Marsella y fue ordenado sacerdote por el Obispo de Mazenod el 25 de mayo de 1850. Solo hay una mención de Florente Vandenberghe en los reportes del maestro de novicios, Padre Ambrosio Vincens: “Perfecto desde todo punto de vista”. El Padre Juan José Lagier, moderador de los escolásticos hace también una sola mención del escolástico: “el Hermano Vandenberghe parce ser excelente… sumiso como un niño, regular hacia la perfección y aplicado. Como enfermero ha mostrado la caridad de una madre. Tímido y reservado, siempre parece temeroso de mostrar quién es y lo que piensa. Trabaja con ahínco, piensa mucho y no habla de lo que hace. Le he conocido por tres años y sido su director por un año”.

Permaneció de 1850-1852 en la iglesia Le Calvaire y Notre-Dame de la Garde en Marsella. Debido a un “defecto en las cuerdas vocales y el acento flamenco”, fue considerado no apto para predicar. En 1852 se convirtió en socius del maestro de novicios, Padre Gustavo Richard en Notre-Dame de l’Osier, reemplazándolo en 1853. Continuó como maestro de novicios hasta 1861, siendo también superior de la casa de 1854 a 1861 y primer consejero extraordinario de la provincia del Norte a partir de 1855. Al enviarlo a Osier, el Obispo de Mazenod escribió al Padre Richard el 29 de mayo de 1852: “Estoy muy encariñado con los belgas. Asegúrese de decirlo al Padre Vandenberghe… Además es de su conocimiento que deseo ver establecida la Congregación en ese país, tan rico en vocaciones”. Al nombrarlo superior, le escribió en una carta del 24 de agosto de 1854: “Tenga valor, mi querido Padre Vandenberghe. Su noviciado funciona bien y por ello damos gracias a Dios y dejamos sea para usted una fuente de consuelo y aliento. En cuanto a lo demás, sea superior sin altivez pero con dignidad y permita a todos ocupar su lugar con el libro de la Regla en mano. Siempre estaré inclinado a apoyar la autoridad hacia y en contra de todo lo demás…”.

Asistente General, Provincial en Canadá y superior de las misiones en Texas (1861-1882)
A la muerte del Obispo de Mazenod el 21 de mayo de 1861, el Padre Tempier, vicario general, nombró al Padre Vandenberghe como Provincial de la Provincia Midi (del sur), conservando el puesto por solo algunos meses, pues el Capítulo General lo eligió como Cuarto Asistente y Secretario General, en diciembre de 1861. Fue en esa posición que realizó la vista canónica a los Oblatos en Canadá del este y los Estados Unidos en 1863-1864 y a Canadá oeste en 1864-1865. A su regreso a Francia trabajó en la modificación del Acta de los Capítulos Generales.

Después del Capítulo General de 1867, el Padre Fabre lo nombró Provincial de Canadá. Fundó muchas casas, en particular el noviciado de Notre-Dame en Lachine, una residencia en Lowell y otra en Temiscamingue. Después del Capítulo General de 1874 fue enviado como superior de las misiones en Texas y poco después nombrado Vicario General en Galveston.

El Padre Vandenberghe fue bien conocido en la Congregación en especial como educador y como director de almas y administrador. Participó en los Capítulos Generales de 1856, 1861, 1867, 1873 y 1879. En su obituario, el Padre José Fabre escribió: “Se puede decir que en verdad amó a Dios en sus obras; en todo lo que hizo, en sus conversaciones y en su comportamiento, era obvio que vivió para y por Jesús. Fue con Dios y en la oración que trató primero ya fuera asuntos de negocios o medidas a tomar concernientes a los miembros de su comunidad. Cuando su oración se tornaba más prolongada e intensa al pie del altar, la reacción inmediata era ‘de nuevo debe haber penas más serias o mayores problemas en el corazón del Padre’. Todos nosotros aún recordamos, pues todos aprendimos la hermosa lección de un Provincial, que a pesar de la multiplicidad de sus preocupaciones y la gravedad de los asuntos con los que debía lidiar, veía tan natural estar en la capilla como en su habitación”.

Después de seis días de enfermedad, el Padre Vandenberghe falleció debido a la fiebre amarilla en Brownsville, el 28 de agosto de 1882.

Yvon Beaudoin y Gastón Carrière, o.m.i.