Dieudonné INAWAY, OMI

El P. Dieudonné INAWAY, OMI, fue uno de los veintidós Oblatos, sacerdotes y hermanos, que participaron en una sesión de formación permanente para Oblatos con menos de 5 años de ordenación y votos perpetuos, que se celebró en Figuil. Nos cuenta cómo todos ellos “escuchaban asiduamente a sus mayores.”

Los oblatos son testigos de Cristo por su forma de ser

Bajo la moderación del padre Noel Doolalila, dedicamos la primera jornada a conocernos profundamente uno al otro. Luego el padre Paulin nos hizo recordar la visión del Fundador donde los oblatos están llamados a perpetuar manteniendo nuestro propio estilo de misión. Los oblatos son testigos de Cristo por su forma de ser, predicar, cercanía a los pobres. Viviendo en comunidad, los oblatos deberían sostenerse los unos a los otros para el bien de la iglesia y de la congregación. Así cada oblato debe darse de sí mismo para el bien de su comunidad.

Algunos principios de vida

Monseñor Antoine Ntalou, compartiendo su experiencia como sacerdote y obispo, nos ha dicho: “Ustedes como yo, somos viejos seminaristas, fuimos seminaristas, y me gusta compartir con los seminaristas y los que fueron seminaristas para saber cuáles fueron sus impresiones cuando dejaron la casa de formación.” Para Monseñor Antoine, muchos sacerdotes encuentran un alivio al terminar la formación primera en cambio otros sacerdotes se arrepienten. Sin embargo la casa de formación da a cada sacerdote algunos elementos o herramientas para la misión. Él nos propuso algunos principios de vida: sostenerse firmemente a los primeros principios adquiridos en la formación primera, mirar y contemplar a Cristo, seguir el ideal de la Cruz, quien contiene un mensaje para nosotros quienes la llevamos y también para los que nos miran. Terminando su discurso, Monseñor Antoine nos hizo recordar que la iglesia no empezó con nosotros. Ella es vieja de más de XX siclos con una larga experiencia. Por eso cada uno de bebe con humildad aportar lo suyo para mejorar y enriquecer la Iglesia.

Continuar la visión de la iglesia universal

El padre Gabriel Djibi, nos habló sobre tres aspectos,

  • Aspecto teológico: todos somos fieles e iguales en dignidad desde nuestro bautismo. Así pues, debemos estar en buena relación con nuestros fieles y transmitirles la fe.
  • Aspecto ministerial consiste en bien guidar los grupos y movimientos preparando bien su homilía. A ejemplo de Cristo quien organizó a los apóstoles en torno de Pedro; los obispos, sacerdotes y diáconos deberían vivir y estar en comunión con el Papa. En esta comunión, nuestro trabajo es continuar la visión de la iglesia universal y del ordinario del lugar.
  • Aspecto práctico: la protección de menores y personas vulnerables.

Comunión, participación y misión

El padre Ludovic, Vicario Provincial, nos compartió su experiencia misionera en la provincial del Cameroun. Tres espacios nos fueron recomendados:
– Su vida propia: requiere cuidarse si mismo, trabajar sobre sus cualidades y defectos.
– Como oblato: nuestra identidad debe ser implementada en nuestra Provincia.
– En fin, la vida cristiana consiste en tres palabras: la comunión, participación y misión. 
En síntesis, esta sesión de formación fue para mí un momento de encuentro con mis hermanos oblatos y me ha ayudado a saber cómo organizar mi trabajo misionero que me confiaron y valorar nuestra herencia.