1. Formador
  2. Predicador
  3. Biografía del Fundador
  4. Otras actividades del P. Rambert y su fallecimiento

Nacimiento en Marsella (Bocas del Ródano), el 8 de julio de 1828.
Toma de hábito en Notre-Dame de l’Osier, el 31 de octubre de 1847.
Oblación en Notre-Dame de l’Osier, el 1 de noviembre de 1848 (nº 220).
Ordenación sacerdotal en Marsella, el 27 de junio de 1852.
Muerte en Fréjus, el 12 de julio de 1889.

Toussaint Rambert nace en Marsella el 8 de julio de 1828. Al parecer, va a Notre-Dame de l’Osier en 1846, pero se le considera demasiado joven y poco dispuesto para hacer un buen noviciado. Se le envía al juniorado de Notre-Dame de Lumières. Cuando, en el verano de 1847, se cerró dicho juniorado, Toussaint y otros cuantos juniores aventajados en sus estudios fueron enviados al noviciado. Su conducta aún dejaba algo que desear a su llegada a dicha casa. El Fundador escribió al P. Santoni, Maestro de Novicios: “No puedo ocultarte que estoy confundido en lo que concierne a Rambert. He sido mil veces correcto al insistir en admitirle, pues tenía todo lo necesario para ser un buen misionero. Parece que este joven ha sido mimado en Lumières. Los que fueron sus directores están aquí convencidos de ello, y el P. Chauvet, quien me ha dado muchos detalles útiles sobre él, también lo cree. Procede como se debe, si se ha descuidado hasta el punto de lo que dices, y si tales informes no son falsos, movidos por prejuicios, cosa que a veces ocurre, no es posible mantenerlo; despídele inmediatamente y dile por qué”. (Oblate Writings I, vol. 10, no. 946, p. 181). El 20 de octubre, da el mismo consejo al P. Vincens, Superior de la comunidad de Notre-Dame de l’Osier: “Si es insolente y protestón, debe ser despedido” (Oblate Writings I, vol. 10, no. 951, p. 189).

A pesar de ello, el joven Rambert comenzó su noviciado en Notre-Dame de l’Osier el 31 de octubre de 1847. No estaban aún satisfechos con su conducta en el verano de 1848. El 1 de julio, el Fundador escribió al P. Vincens: “¿Qué habremos de pensar de este Rambert, al que se ha aceptado como un favor, restituído por caridad, y que aún es tan imperfecto?” (Oblate Writings I, vol. 10, no. 982, p. 228). Hizo su oblación el 1 de noviembre de 1848. En la sesión del 2 de octubre de 1848 de la Administración General, fue admitido a votos. En las actas de la sesión, el secretario escribe: “Se debatió por algún tiempo su aceptación y se tenían dudas. Se presentaron razones a favor y en contra. Entre las últimas se encontraban, sobre todo y principalmente, los defectos del carácter de este joven, su mordacidad, su carácter bastante frívolo y poco preocupado por la vida de oración. En lo positivo, se exhibieron sus talentos, que sobresalen de lo normal, su observancia muy regular y su amor por la vocación. El resultado de las deliberaciones cayó del lado afirmativo. Por tanto, fue aprobado para la oblación”.

Tras cuatro años de estudios teológicos en el Seminario Mayor de Marsella, Toussaint es ordenado sacerdote por Mons. de Mazenod el 27 de junio de 1852. Desde entonces, no se volvió a hablar de su carácter ni de su espíritu mezquino. Como formador, predicador y escritor, se convirtió en uno de los oblatos mejor considerados.

Formador.
El P. Rambert pasó su vida en casas de formación. Es profesor de Dogma y Derecho Canónico en el Seminario Mayor de Romans en 1853-1854, y sucesivamente, profesor de Sagrada Escritura, Dogmática, Moral y Derecho Canónico, más tarde de Retórica en el Seminario Mayor de Marsella de 1854 a 1862, Maestro de Novicios en Nancy de 1862-1865, superior en Aix de 1865 a 1868, Superior del Escolasticado de Autun de 1868 a 1877, Superior del Seminario Mayor de Fréjus de 1877 a 1889. A su muerte, en 1889, Mons. F. H. Oury, Obispo de Fréjus, escribió una carta circular al clero en la que alababa los méritos del P. Rambert como formador, pero, sobre todo, por sus dotes como consejero y colaborador en calidad de superior del Seminario Mayor durante doce años. Entre otras cosas, escribió: “Vimos aumentar cada día el papel que desempeñó en nuestras decisiones y nuestros consejos. La vivacidad de su espíritu, la envergadura de su inteligencia, sus distintas aptitudes, la facilidad con la que se hacía con los problemas, la rapidez con la que los asimiliba, otorgándonos un auxilio precioso, cuya ausencia en muchas circunstancias, será sentida dolorosamente. No tardamos en convencernos de la gravedad de sus juicios, de su discrección, de la solidez de su adhesión al deber…” (Missions O.M.I., (1889), p. 418).

Predicador.
Durante toda su vida el P. Rambert predicó numerosos retiros, sobre todo a oblatos, pero también a religiosas. Siendo superior de la casa de Aix, impartió numerosas misiones parroquiales, junto con los sacerdotes de aquella comunidad. En 1865, predicó en Talence un retiro para los sacerdotes del Mediodía. El cronista en Missions O.M.I. dejó escrito: “El retiro se abrió el 4 de junio por la tarde, día de Pentecostés. Ha sido predicado por el R.P. Rambert. Son conocidas las cualidades que caracterizan el talento de oratoria de este padre. Las funciones de maestro de novicios que ha desempeñado en Nancy, su prolongado ministerio en los seminiarios mayores de Romans y Marsella, su antigüedad en la Congregación, su celo y su dedicación a todos los intereses de nuestra querida familia, dotan a su palabra y a sus enseñanzas de una autoridad persuasiva. La riqueza de fondo se une a la sencillez y la precisión en la forma. El tema era largo y fecundo (…). Se acogieron con gozo estas instrucciones donde la lógica formaba una unidad rica del todo en miles de detalles que la experiencia ponía en labios del orador: no era para nada cansino escucharle, porque la verdad refulgía a cada instante en las nuevas percepciones y en las más nuevas aplicaciones…” (Misions O.M.I., 1865, p.441).

Biografía del Fundador.
En 1875, El P. José Fabre, Superior General, pidió al P. Rambert que escribiera una biografía de Mons. de Mazenod. Enseguida se puso a ello, trabajando dos años, todo lo que podía, en los archivos de Marsella y de la casa general de París. Tomaba notas y copiaba extractos de los documentos. En 1877 anunció que cuando se le solicitó hacer “este precioso trabajo, el obrero se quedó aterrorizado por su incapacidad, el religioso no debía sino obedecer y el hijo lanzarse con ardor a cumplir una tarea tan consoladora”. Tenía cerca de 2.000 páginas de notas y extractos. A propósito de ello se puede leer en Missions O.M.I., 1876, pág. 217: “Apenas investido de tal misión de confianza, el padre Rambert se puso manos a la obra, y ya ha examinado y clasificado una voluminosa correspondencia. Es una operación preliminar importante. El resto seguirá, y con la actividad y el talento que distinguen al escribano, se puede esperar ver pronto una bella vida del Fundador ocupando un lugar destacado en las bibliotecas de nuestras comunidades”.
En 1879, el padre escribió que había llegado al año 1856 en la composición de la vida del Fundador, y “Missions O.M.I.” de 1883 anunciaba que la biografía acababa de aparecer en dos volúmenes, constituyendo una obra de 1.520 páginas. El Cardenal Guibert, Arzobispo de París, y Mons. Robert, Obispo de Marsella, entre otros, mostraron su agradecimiento al autor y alabaron su trabajo (Missions OMI, 1883, págs. 457-461).

Otras actividades del P. Rambert y su fallecimiento.
A pesar de sus numerosas ocupaciones y responsabilidades, el P. Rambert aceptó ser primer consultor ordinario de la Provincia del Mediodía de 1877 a 1882, y consultor extraordinario en 1882-1888. Tomó parte en el Capítulo General de 1873 como delegado de Natal, y en los Capítulos de 1879 y 1887 como delegado de la Provincia del Mediodía.

El P. Rambert falleció el 12 de julio de 1889, tras algunos días de enfermedad por una fiebre perniciosa. Se anunció su muerte en el número de 1889 de Missions O.M.I., (pág. 417) en los siguientes términos: “¡El pasado 12 de julio, la muerte ha asestado entre nosotros un golpe bien sentido y ha infligido a la Congregación una cruel pérdida!. El padre Toussaint Rambert, superior del Seminario Mayor de Fréjus, ha muerto, casi súbitamente, en la plenitud de su talento y en la madurez de su experiencia, en una carrera bien cumplida y que prometía ser aún larga (…). Una noticia necrológica será un día dedicada a la memoria de nuestro querido difunto…”. Tal necrológica jamás fue escrita.

La memoria del padre Rambert permanece viva en la Congregación, sobre todo por haber sido el primer biógrafo del Fundador, aunque también por otros muchos motivos. El cronista de Missions O.M.I. escribió, por ejemplo, en 1907: “El padre Rambert había recibido del cielo distintos talentos, que raramente se encuentran juntos en un mismo hombre. Sabía, según el caso, brillar en los salones y edificar en el claustro. En él, la distinción del caballero realzaba el esplendor del hombre de Dios. De pocos religiosos se podrá decir con mayor verdad de él: “Domine, dilexi decorem domus tuæ [“Señor, he amado el esplendor de tu casa”]. Nuestras capillas de Nancy, Aix, Autun y Fréjus son los momumentos de su espíritu de piedad hacia el Santísimo Sacramento…”.

Yvon Beaudoin, o.m.i.