Nacimiento en: Port Louis, Morbihan, Francia, Julio 12, 1834.
Toma de hábito en: N.-D. de l’Osier, Enero 12, 1856.
Oblación en: N.-D. de l’Osier, Enero 13, 1857 (No. 432).
Ordenación sacerdotal en: Marsella, Junio 23, 1859.
Muerte en: Brownsville, Texas, Octubre 6, 1862.

 

Francisco María Sivy nació en Port Louis, diócesis de Vannes, Francia, el 12 de julio de 1854. Al concluir un año de teología en el seminario mayor de su diócesis, comenzó su noviciado en Notre-Dame de l’Osier el 12 de enero de 1856, donde tomó votos el 13 de enero de 1857. En diciembre de 1856 el maestro de novicios, Padre Florente  Vandenberghe había presentado su candidatura para votos al Consejo General, con ciertas reservas: “Me gustaría que pasara algún tiempo en  Montolivet antes de tomar votos. Este Hermano cuenta con buena salud y buena disposición, sentimientos y habilidad adecuados. Tiene un defecto natural de tartamudeo, pero sólo al leer. Los superiores de la casa donde realizó sus estudios hasta el segundo año de teología han dado buena referencia en cuanto a su capacidad. Su comportamiento durante el noviciado fue normal e incluso mostró algo de generosidad. Sin embargo, su comportamiento es algo disipado y sería mejor si fuera más recatado”.

Realizó su escolasticado en Montolivet de 1857 a 1859. El moderador de los escolásticos, Padre Antonio Mouchette, siempre lo alabó. En el reporte de 1857 leemos; “Un religioso bastante bueno, lleno de buena voluntad, siempre alegre, de buen avance a pesar de las dificultades; y en 1858: “excelente religioso, con celo, piadoso, obediente, de carácter alegre, siempre feliz; 1859: “un religioso bastante bueno en todo, generoso, muy regular, de aptitudes normales, aunque será de mucha utilidad en una misión pues puede realizar muchas cosas materiales, que compensarán su dificultad para hablar, que casi le impide predicar”.

El Obispo de Mazenod lo ordenó sacerdote el 23 de junio de 1859, dándole una obediencia para Texas. Salió en compañía del Padre José Rieux en octubre de 1859. Al llegar fue asignado a Victoria en México, donde permaneció por algunos meses ese año. Más adelante estuvo en Brownsville, donde falleció de fiebre amarilla el 6 de octubre de 1862, al igual que el Padre Eugenio Schumacher. El Padre Agustín Gaudet informó al Padre José Fabre en una carta del 8 de octubre: “Es una gran y dolorosa pérdida. El servicio que ya había ofrecido en la misión y en especial a este establecimiento por sus habilidades en cada área, nos da razón para pensar que hubiera sido una esperanza real para el futuro del país. La tarea que realizó en la iglesia hará que su muerte sea lamentada por nuestros católicos por mucho tiempo.” El Padre Fabre añadió al obituario: “Todos los que le conocieron recordarán la bondad de su carácter, la sonrisa que habitualmente tenía en los labios, su obvia piedad y caridad fraterna. Murió a los veintiocho años y algunos meses.”

Yvon Beaudoin, o.m.i.